La República Dominicana es un paraíso para el turismo. Su conocida costa caribeña, con varias de las mejores playas del mundo, constituyen su principal atractivo, pero los amantes de la montaña también pueden elegir este país. De hecho, junto a la ciudad de Santiago se encuentran cuatro de las cinco montañas más altas de todo el Caribe. Por si fuera poco, la arquitectura colonial de sus ciudades permite disfrutar paseando por las zonas urbanas.
Si tienes tiempo, debes viajar hasta el suroeste de la República Dominicana para llegar hasta el parque nacional Jaragua, donde se encuentra la bahía de las Águilas. Esta es una zona protegida y con un turismo ecológico.
Si te gusta el fondo marino, el parque nacional submarino La Caleta está considerado como uno de los mejores lugares para bucear de todo el Caribe por sus arrecifes y cuevas.
Uno no puede viajar a la República Dominicana sin sentir el bullicio de la capital, Santo Domingo. Alejado de la tranquilidad de las playas paradisíacas, perderse en las calles empedradas de la Zona Colonial es una experiencia obligatoria.
La localidad de Jarabacoa, situada pleno corazón de la isla, es un lugar ideal para realizar "trekking" montañoso en busca de las diferentes cascadas, como el salto de Baiguate y, sobre todo el salto de Jimenoa Uno.
Los amantes de los deportes de agua no pueden perderse la costa de Cabarete. Con muchísima gente joven y ambiente festivo, sus playas son perfectas para la práctica del kitesurf, pero también del surf o del windsurf.
Si quieres disfrutar en las playas de la República Dominicana sin preocupaciones, debes viajar en la temporada seca, entre diciembre y marzo. De abril a julio, también puedes viajar, pero debes saber que hay más días nublados y puede llover de forma esporádica.
Los ciudadanos de la Unión Europea no necesitan ningún visado para viajar a la República Dominicana y permanecer allí hasta treinta días. Cabe recordar que, desde el 2018, ya no se necesita la tarjeta de turista. Si quieres permanecer hasta noventa días, podrás hacerlo pagando unos 2500 DOP (unos 45 EUR) al abandonar el país.
Los principales aeropuertos son el internacional Las Américas de Santo Domingo y el internacional de Punta Cana, ambos con conexiones directas desde Madrid.
Otra alternativa inolvidable para viajar a la República Dominicana es hacerlo por mar. Hay varias opciones para reservar un crucero entre Barcelona y Santo Domingo, con un precio de unos 30000 DOP (500 EUR, aproximadamente); el viaje dura quince días.
Si quieres relajarte por completo, en la República Dominicana puedes optar por un hotel todo incluido, típico en Punta Cana y otras zonas turísticas. Si buscas alternativas más económicas, también puedes optar por los albergues de estilo surfero que existen junto a la playa.
El transporte público en las ciudades se resume en los autobuses que recorren los bulevares principales, a un precio de unos 12 DOP (0,20 EUR, más o menos).
Es el principal medio de transporte entre las distintas ciudades y son vehículos nuevos y con aire acondicionado. El precio para un viaje de larga duración ronda los 250 DOP (unos 4,50 EUR). Otra alternativa aún más económica son las guaguas, que se pagan en el interior del vehículo y no hay paradas preestablecidas, por lo que prepárate para gritarle al conductor cuando quieras apearte. El precio ronda los 100 DOP (alrededor de 1,5 EUR) para un viaje de 2 h.
Alquilar un coche es una buena opción para llegar a los lugares más complicados, aunque hay que tener cuidado con los baches. El precio medio del alquiler diario es de unos 600 DOP (10 EUR, más o menos).
Si tienes poco tiempo y quieres conocer toda la isla, puede ser un medio de transporte que tener en cuenta, aunque los costos son altos. La conexión más habitual son los vuelos entre Punta Cana y Samaná.
SUV compacto
4 adultos, 2 maletas
$909/día
Compacto
4 adultos, 2 maletas
$1,358/día
El coste de la vida en la República Dominicana es relativamente económico, y pueden realizarse excursiones por un precio de alrededor de 1500 DOP (unos 25 EUR), mientras que comer en un buen restaurante apenas puede costar los 1200 DOP (unos 20 EUR). En muchas tiendas y restaurantes locales puedes encontrar problemas para pagar con tarjeta, por lo que es mejor disponer de efectivo.